Un depósito de agua con conexión a bajante es una forma sencilla y económica de recoger el agua de lluvia y utilizarla de forma sostenible. Su principio es sencillo: el agua de lluvia que cae del tejado de una casa se desvía a través del bajante hacia el depósito. Se necesita un colector de lluvia o un filtro de bajante para desviar el agua hacia el depósito, que se instala en el bajante. Cuando llueve, el colector dirige el agua hacia el depósito. Un filtro de bajante garantiza una calidad óptima del agua. Gracias a un dispositivo anti-rebose, el exceso de agua simplemente fluye de vuelta al bajante. En invierno, se detiene la entrada de agua al depósito de agua de lluvia.

Un colector de lluvia cumple varias funciones a la vez:

• Filtración: Retiene hojas, suciedad e insectos para que el agua del depósito se mantenga lo más limpia posible.
• Protección contra rebose: En cuanto el depósito se llena, el colector desvía automáticamente el agua de vuelta al bajante. La instalación es sencilla: se corta un trozo del bajante, se inserta el colector de lluvia y desde allí se conecta una manguera al depósito de agua. Gracias al sencillo cambio del modo verano al modo invierno, el agua de lluvia no entra en el depósito conectado durante el cambio en invierno. Esto evita que el depósito se congele.

El agua se puede extraer fácilmente del depósito con un grifo. Este se enrosca en la conexión roscada estándar del depósito sin necesidad de taladrar.

Un depósito de agua con conexión a bajante es una solución económica y ecológica para ahorrar agua. Esto puede reducir significativamente el consumo de agua potable en el jardín, especialmente en los meses de verano.